Nov 4, 2008

Cantemos lo nuestro

La semana pasada fuimos anfitriones involuntarios de uno de los eventos más importantes que ha visto nuestro paísito en mucho tiempo. Tuve la suerte de estar al tanto, de una manera más o menos tangencial, de la cumbre, ya que participe en un evento paralelo (Vanguardia Iberoamericana), que busca ser la voz de la juventud de Iberoamérica por medio de un acta que fue entregada a los presidentes. Pero hoy no voy a hablar del acta que escribimos, ya habrá más artículos para eso, hoy quiero dedicarme a hecharle flores al protagonista de la cumbre, y decirle "Te luciste, brother". El Salvador, sos impresionante.
Fue hasta que estuve enmedio de tantos acentos, lenguas, colores y opiniones, que me di cuenta de nuestro El Salvador Impresionante. Con un clima que habíamos mandado a encargar de los cielos, expresamente para nuestros invitados, vi a través de los ojos de mis compañeros foráneos, a mi país bajo otra luz. Nunca he dudado, ni por un segundo, de las capacidades del salvadoreño: trabajador, sonriente, terco, malhablado... pero que me las confirmaran día a día con cumplidos para nuestra tierra fue el equivalente a oir que tenés la casa más bonita del mundo.
Y es cierto, esta semana no sólo me sentí patriota. También me sentí Iberoaméricana, latina, un poco caribeña, internacional y ciudadana del mundo. Me di cuenta que al final del día, lo que nos une es mucho más fuerte que los acentos o opiniones políticas, geografías o situaciones climáticas que nos separan. Descubrí que las ganas de cambiar el mundo, son más comúnes en los jóvenes que lo que aparenta a veces nuestra juventud dormida. Descubrí que al final del día, a lo largo y ancho de nuestros continentes que poblamos con diferentes versiones de lo que nos han dicho que es español, a todos nos cubre el mismo cielo...
Y me dieron ganas de trabajar más duro, para seguir levantando este país con todo y su política (o a pesar de ella). Para ponerlo en alto, como lo hiciera en su poesía nuestro Alfredo Espino, diciendo:
El terruño es la fuente de las inspiraciones:
¡A que buscar la dicha por suelos extranjeros,
si tenemos diciembres cuajados de luceros,
si tenemos octubres preñados de ilusiones!
Si bien no a todos se nos da la poesía, a todos se nos puede dar la ilusión y el trabajo duro. Hay que dejar de esperar que nuestros gobiernos lo hagan todo por nosotros. Se comienza por sentirse doliente en carne propia de las cosas que afectan a nuestro país y a nuestros hermanos más pobres. Se comienza por soñar... como lo hacía Espino:
Vamos, pues, a soñar bajo tibios aleros de naranjos en flor...
cabe los manantiales:
octubre nos regala sus rosas y vesperales;
diciembre las miriadas de todos sus luceros.

0 comments: