Jul 9, 2008

A eso llamo yo “una semana balanceada”

Soy un total fanático del Karma y de las libertades individuales. Es lo que me mantiene bajo buen comportamiento la mayoría del tiempo; eventualmente en algún momento creo que a todos nos toca responder por nuestras acciones, y no me refiero solo a lo mejor en algún tipo de “vida siguiente”, sino que en esta misma. Complementando, creo que existe un “algo” en esta vida que mantiene todo en balance (O si bien mas desde el punto de vista de Squada, nuestra vida tiene un retorno esperado de cero). Algo así como un árbitro para la vida. Contrapesos que evitan que nos vaya demasiado bien o extremadamente mal...

El sábado pasado tuve un encuentro con una de esas personas que creen que pueden vivir sus vidas a expensas de los demás. Fui asaltado. No los aburriré con algo trivial como lo es el relato de los detalles del incidente. No fue nada al estilo de Hollywood, solo míseros 5 o 10 segundos de acción y se acabo (Uds. se lo pueden imaginar). La experiencia no me ha dejado ese nuevo aprecio por la vida que muchos predican; ningún nuevo deseo que sacarle el mejor provecho a cada minuto. Con lo único me que dejo por los siguientes días, fue un sentimiento de odio e ira hacia esa persona y los de su tipo. Cualquier tipo de tolerancia que antes tenía para con las personas que se dedican a una vida de crimen ya sea por A o B motivo, desapareció durante los días posteriores.

“Para que acción que sucede, se da una reacción igual y en dirección opuesta”. Newton estaba pensando más a las aplicaciones físicas de su ley. Pero yo estaba seguro (o por lo menos esperaba) que mi asaltante prontamente aparecería crucificado o por lo menos falto de algún miembro u órgano vital. Es fácil dejarnos manipular por nuestras emociones, en mi caso, deseos no me faltaban para convertir a San Salvador en una nueva versión de “Gotham City”. Fue entonces cuando le preste nueva atención a recientes acontecimientos mundiales.

El 2 de julio pasado fue liberada Ingrid Betancourt después de 6 años de cautiverio. Tengo mis razones para reaccionar como lo hice. Me fue imposible contener las lágrimas al ver la noticia en CNN. Lo que trato de decir es que en mi caso particular, necesite algo así de fuerte para recobrar mi esperanza en este mundo. Fue justo lo que necesitaba para volver a pensar que si existen razones por las cuales vale la pena otorgar constantes segundas oportunidades a nuestro intento de convivir como gente civilizada. Ingrid me demostró que el rencor no trae mejores soluciones. Volvía a pensar que la humanidad se merece el beneficio de la duda.

A lo mejor todo está en mi cabeza. Solo se de que me estaba yendo mal y ahora todo volvió a la normalidad. Llámenle Dios, “the force” o lo que quieran. Solo puedo decir que creo que para mí, la vida funciona de esta forma. Lo he llegado a ver similar a tener una tarjeta de crédito emitida por el universo. Mientras use mi crédito de forma responsable (evitando ganarme la lotería sin merecerlo por ejemplo), todo estará bien. Y en caso de robos no tengo porque preocuparme, sé que mi póliza lo cubre. Intento todos los días no sobre girarme, ya que no puedo darme el lujo, en ciertas situaciones a que me salga denegada...

1 comments:

Squada said...

que te rebote una black american express esta dificil jajaja, pero me gusto tu punto, es como un remake de mi teoria aburrida de retorno esperado de 0. Todo lo que hacemos se paga en esta vida, al igual que todo lo que nos hacen se nos paga en esta vida. Al pasarnos cosas malas es como que le estamos dando un prestamo al universo, prestamo que se nos pagara con sus respectivos intereses, lo peligroso es darse cuenta que nosostros tambien tenemos que pagar nuestros propios prestamos, sean del tamanno que sean... y no vale pagarlos en otra vida, se pagan en esta... solo que no se te olvide que no importa cuanto te deban ni cuanto debas... tenes que tener cuidado que al final... siempre SIEMPRE todo suma ZEEEROOO.

Buenisimo blog Mr. Wayne